Todos somos perfectos a nuestra manera, todos nos ponemos nuestra guinda la cual decora el pastel de nuestro ser. Unos saltamos y otros caemos, pero tenemos la virtud de sabersnos levantar con la mirada al frente.
Unos lloran frente a un desafortunio, mientras que otros rien a carcajadas al ver la dificultad que le presenta la vida, y la cual se resolverá antes o después, no existen preocupaciones gigantes, éstas son producidas por la propia mente.
En 5 años sólo quiero con muchas ganas seguir siendo yo.
ResponderEliminarEDUARDO