Se oye algo, no se escucha bien. Se pone atención, y algo recorre el cuerpo. Puede describirse como una sensación de angustia junto con desesperación, pero se aprecia una pequeña cantidad de esperanza, aunque incomprensible. Ésta por pequeña que sea, vence. Entonces el cuerpo siente mejor aquellas palabras, lleva al recuerdo la mente y allí es donde se procesa el momento, donde se conectan los segundos, minutos, horas vividas, las cuales fueron olvidadas por la presencia del dolor.
La mirada queda perdida, los ojos miran al frente con incredulidad, y algo sale de dentro, algo que dice que es momento de recordar y sentir la fuerza correr por el cuerpo, sentir como el corazón bombea el hormigón necesario para volver a construir aquel pilar que quedo derruido.
Ella es responsable de que el suelo vuelva a encontrarse bajo sus pies, de que no ha quedado perdida en el abismo bajo la desorientación.
Escribes bien, me gusta, por cierto sales guapísima en la foto, muy fotogenica siempre en todas. Un beso. ;)
ResponderEliminar"el corazón bombea el hormigón necesario para volver a construir aquel pilar que quedo derruido"
ResponderEliminarTRISTEMENTE BELLO Y ESPERANZADOR :)
Saludos
Muy lindo texto! Siempre siento, a pesar de todo, un poco de esperanza, pero muchas veces es demasiado pequeña como para salir adelante. Aún así, el tiempo cura todo. Y como dijiste, nada parece fácil pero tampoco dificil.
ResponderEliminarUn beso, me gusta mucho tu blog!
Me encantaaa el bloog. Besos
ResponderEliminarHace poco estudie esa plaza! jaja
ResponderEliminaraa que linda foto! y la entrada entera,claro
ResponderEliminarun beso graande♥